No es un problema político, es un problema moral

El 26 de octubre de 2006 se presentó en España el documental “An Inconvenient Truth (Una verdad Incómoda)” (2006) de Davis Guggenheim dentro del Festival Internacional de Cine de Valladolid tras su paso por grandes festivales internacionales de la talla de Cannes o Sundance. La semana siguiente, el 3 de noviembre de 2006, se estrenó en los cines de todo el país. Todo un éxito en lo comercial y en lo crítico, este documental se alzó con numerosos premios por todo el planeta, entre ellos el Oscar al Mejor Largometraje Documental y el de Mejor Canción Original, lo cual supuso un mayor impulso, todo un gran sistema de megafonía, para la verdad de su importante mensaje.

Siguiendo el hilo conductor de una de las tantas conferencias que sobre el cambio climático imparte por el mundo el ecologista, político y ex vicepresidente de los EE.UU. Al Gore, nos plantea de una forma muy didáctica, sencilla, amena, pero contundente y sin concesiones, el proceso degenerativo que estamos infligiendo los humanos a nuestra madre Tierra.

Hoy quiero hablar de este documental no sólo porque me ha gustado y estoy totalmente de acuerdo con su mensaje, si no porque creo que es un deber moral (haciendo mías las palabras del señor Gore) el divulgar su mensaje. Debería ser obligatorio su visionado en todos los centros educativos y organismos públicos, de España y del resto de mundo.

Albert Arnold Gore, Jr. o Al Gore (nacido en Washington D. C. el 31 de marzo de 1948), fue el cuadragésimo quinto Vicepresidente de los Estados Unidos por dos legislaturas (entre 1993 y 2001) bajo la presidencia de Bill Clinton, y candidato a la presidencia del país en el 2000, cuando perdió las elecciones presidenciales frente a George Walker Bush con unos más que dudosos resultados.

Aunque este interés ecologista del ex vicepresidente Gore no fue conocido en España popularmente por lo menos hasta el estreno de este documental, es cierto que su lucha en pro del planeta viene de mucho antes. Su activismo ecologista ya era famoso en los años 90 donde su principal preocupación era el control de natalidad ante un grave problema superpoblación del planeta, acciones que supusieron duros enfrentamientos con el Vaticano y algunos países católicos y árabes. En 1992 Al Gore publica el ya clásico “Earth in the Balance: Ecology and Human Spirit”, en el cual plantea una revolución ecológica necesaria para el siglo XXI. Tras perder las elecciones presidenciales frente a George W. Bush en el 2000, cambió el eje de su discurso hacia el anuncio del "calentamiento global", o más recientemente, el "cambio climático", consecuencia de la actividad industrial que produce emisión de CO2 a la atmósfera. En 2005 fundó una cadena de televisión, Current TV.

En 2006, tras el estreno de su documental “An Inconvenient Truth (Una verdad Incómoda)” acerca del calentamiento global ganó mayor notoriedad mundial que cuando estuvo de segundo en la Casa Blanca. Reconocimiento oficializado en 2007 con dos de los más importantes galardones a nivel mundial en acción social, el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional y el Premio Nobel de la Paz junto al Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU «por sus esfuerzos para construir y diseminar un mayor conocimiento sobre el cambio climático causado por el hombre y poner las bases para la toma de las medidas que sean necesarias para contrarrestar ese cambio».

Hoy, tras ver este documental, uno no puede evitar preguntarse qué sería de los Estados Unidos, y de todos nosotros, si Al Gore se hubiera alzado con la presidencia de su país en las controvertidas elecciones del año 2000:

George W. Bush (Republicano) - 271 votos electorales (47,9% del voto popular)
Al Gore (Demócrata) - 266 votos electorales (48,4% del voto popular)

En estos 8 años de legislatura de George W. Bush se han sucedido oscuros acontecimientos: Rechazo EE.UU. al protocolo de Kioto (2001), Atentado terrorista islamista en el World Trade Center de Nueva York (2001), Madrid (2004), Londres (2005) y Mumbai (2006), Guerra de Afganistán (2001) y de Iraq (2003), Desastre del huracán Katrina (2005), Crisis de las hipotecas subprime o hipotecas basura (2007-2008) ... Y un sistema electoral presidencial lleno de sombras y muchas dudas, que casualmente favorecieron a Bush hijo tanto en las elecciones de 2000 como de 2004.