miércoles, 18 de julio de 2007

Estado de "Fast food"

Miércoles, mitad de semana ... Un día ni feliz, ni triste. Ya estamos en el ecuador de la semana laboral. Me he levantado, desayunado, fregado los platos acumulados en un par de días de desgana ... Pero la mañana no da más de sí, he revisado el correo y nada. ¿El móvil? Ningún sms. Hoy entro tarde a trabajar y la mañana resulta de lo más inactiva ... Totalmente falta de ilusión. Es un día laborable y falto de planes, como casi todos los días laborables en general. Bueno, está el trabajo, bendito trabajo que nos aporta el dinero que necesitamos para subsistir. Bendito que nos ocupa 8 horas (mínimo) del día y nos mantienen ocupados ...

Miércoles ya, aunque la ilusión es la misma de un lunes, y peor aún, igual que un viernes noche ... Que total falta de ilusión. La soledad resulta ser una carga muy pesada a veces, supongo que me he quedado desfasado. No soy una fashion victim, no voy a la última. Se llevan las gafas de sol grandes, yo me quede en las normales y las pequeñas ... Ahora se lleva mucho la soledad, el “amor” klinex, para compañía ya se tienen a los amigos ¿para qué más? ... Que anticuado me veo a veces. No es que uno pretenda conocer a la persona de su vida a la primera, ni que pretenda llegar virgen al matrimonio o empezar algo serio desde el principio ... Simplemente que ahora todos padecen un serio complejo de guardias de tráfico, a la primera, tras el hola me llamo tal te plantan la señal de stop en las narices con el subtítulo “no busco nada serio”. Y así, ¿quién se esfuerza? Él no lo va a hacer. ¿Voy a ser yo el tonto que sí? ¿Quién puede competir con el ansia consumista de hoy en día? Desde pequeño se nos incita al coleccionismo, a los cromos, a tener más y más ... ¿Disfrutamos de esas colecciones? ¿Al terminarlas volvemos a echarles un vistazo o ya tenemos en mente la siguiente? La carrera tecnológica: Me compro tal ordenador a la última, que al día siguiente ya es el ordenador del jurásico ... ¿Piensas que con las personas es distinto?

Un amigo me habla mucho de que hay que saber esperar el tren, que ya vendrá. Que si no funciona pues uno se sube o se baja, y no pasa nada, ya vendrá otro ... Vivirá en una ciudad con metro con trenes cada 5 minutos. Yo sin embargo vivo en una villa perdida de Las Hurdes extremeñas, pero de las que retrató Luis Buñuel.


Uno está ya tan de vuelta de todo, se ha forzado tanto la rosca que ha terminado por pasarse ... Ahora es imposible que cierre bien, que encaje bien en ningún sitio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

vámonos a extremadura!!! :-)

anímate pequeño....

besos